Sinopsis
Andrea pinta desnudos
utilizando técnicas que priman lo sensorial por encima
de lo racional, y mantiene con su modelo una relación
sexual inmersa en una espiral de violencia. Pedro es un
ambicioso ejecutivo que trabaja en un grupo editor de
revistas y trafica con secretos de empresa. Malú ejerce
de madre entre los primates que cuida en un zoo, incapaz
de tener sus propios hijos. Simbolizan los instintos
básicos: la pulsión violenta, la alimenticia y la
reproductiva, en un universo contemporáneo. En el
preciso momento en que sus vidas se cruzan, los tres
necesitan una escapatoria.
¿Es huir un instinto irrefrenable o una facultad que se
puede aprender? Huir para dejar atrás una forma perversa
de amar, un presente asfixiante, o para obedecer un
impulso. Porque es la última salida o porque es la más
atractiva. Aprender a huir es la novela de una búsqueda,
movida por una insatisfacción casi congénita, que cifra
en la huida el destino de cada personaje.
Estructurada mediante dos elementos narrativos opuestos,
la noche y el día, esta novela circular articula una
doble perspectiva que conjuga el veloz discurrir de los
hechos con la reflexión y la memoria. La trayectoria
literaria de Care Santos, una de las más
relevantes de los últimos años, se consolida ahora con
el buen pulso que sustenta esta inquietante y agridulce
historia de impecable factura.